Bueno, seguimos de fiesta en la vieja Iruña; el día parece que levanto con mejor
temperatura y hoy, Día de los Niños, después de ver el encierro y prepararnos un almuerzo potente, nos hemos propuesto pasar el día con los mas pequeños.
El encierro ha durado alrededor de dos minutos y medio, poco mas, y entre algún contusionado mas, un herido por asta a la altura del glúteo; sigue habiendo mucha gente, en algunos tramos demasiada, a partir de la cuesta de el ayuntamiento, y sigue habiendo corredores que abusan del toro; al final, entre el hecho de las multitudes que se forman, y que en mayoría abusan de la nobleza de este animal, a sabiendas que, aquí, como en la mayoría de las cosas que nos gustan, los que tienen el poder, acabaran cambiando las cosas y tener seguro, que no nos va a gustar nada, claro que, como en otras muchas ocasiones, y basándose en opiniones puramente especulativas, egoístas e interesadas, se agarran al puedo, mando y ordeno,cambian las cosas y si te he visto no me acuerdo.
Pero hoy , día de los niños, tampoco vamos llevarnos mal rato, y vamos como no después de prepararnos un almuerzo, junto con los niños, que , por cierto, ya han asimilado que hay que cumplir con los ritos publicos, sobre todo los que te mantienen "vivo", la mayor parte del día.
Lo primero que hicimos fue dirigirnos hacia la estación de autobuses para coger la salida de los gigantes y cabezudos, para después marchar a la ofrenda de los críos al patrón, y seguir con los gigantes, cabezudos, bandas y fanfarres , al ritmo siempre de la música, hacia la plaza de los Burgos, p
ara desde allí irnos a la Plaza Conde de Rodezno, una de las zonas, donde mejor se lo pasan estas criaturas, aparte por supuesto de los puestos de, , y las barracas donde se encuentran esas maquinitas que desde niños hasta ahora mismo, nos aceleran las pulsaciones y de algo que mis padres me indiciaron y yo, como buen aplicado, he seguido manteniendo como si de un ritual se tratase: allá donde haya un puesto de vinico dulce, con su correspondiente barquillo, allí estamos.
temperatura y hoy, Día de los Niños, después de ver el encierro y prepararnos un almuerzo potente, nos hemos propuesto pasar el día con los mas pequeños.El encierro ha durado alrededor de dos minutos y medio, poco mas, y entre algún contusionado mas, un herido por asta a la altura del glúteo; sigue habiendo mucha gente, en algunos tramos demasiada, a partir de la cuesta de el ayuntamiento, y sigue habiendo corredores que abusan del toro; al final, entre el hecho de las multitudes que se forman, y que en mayoría abusan de la nobleza de este animal, a sabiendas que, aquí, como en la mayoría de las cosas que nos gustan, los que tienen el poder, acabaran cambiando las cosas y tener seguro, que no nos va a gustar nada, claro que, como en otras muchas ocasiones, y basándose en opiniones puramente especulativas, egoístas e interesadas, se agarran al puedo, mando y ordeno,cambian las cosas y si te he visto no me acuerdo.
Pero hoy , día de los niños, tampoco vamos llevarnos mal rato, y vamos como no después de prepararnos un almuerzo, junto con los niños, que , por cierto, ya han asimilado que hay que cumplir con los ritos publicos, sobre todo los que te mantienen "vivo", la mayor parte del día.
Lo primero que hicimos fue dirigirnos hacia la estación de autobuses para coger la salida de los gigantes y cabezudos, para después marchar a la ofrenda de los críos al patrón, y seguir con los gigantes, cabezudos, bandas y fanfarres , al ritmo siempre de la música, hacia la plaza de los Burgos, p
ara desde allí irnos a la Plaza Conde de Rodezno, una de las zonas, donde mejor se lo pasan estas criaturas, aparte por supuesto de los puestos de, , y las barracas donde se encuentran esas maquinitas que desde niños hasta ahora mismo, nos aceleran las pulsaciones y de algo que mis padres me indiciaron y yo, como buen aplicado, he seguido manteniendo como si de un ritual se tratase: allá donde haya un puesto de vinico dulce, con su correspondiente barquillo, allí estamos.
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