huerto 41, poema

Con fuerza
amanece el sol,
con brillo,
pero sin pausa.
Fecunda de rojo
la huerta tranquila,
el sustento ya llega,
la planta se alegra.
La noche, la duda
dejaron reposo,
y, al comenzar el día,
comienza la lucha.
El huertano asiente,
-hoy puede llover.
La tierra se alegra,
las plantas, tambien.
               tx